Aprendizaje médico electrónico: Aproximación centrada en la tecnología vs. Aproximación centrada en el alumno

shutterstock_223736014Por: European Heart Association

Hoy en día, dependemos de la tecnología. Vayamos donde vayamos y hagamos lo que hagamos, cualquier tarea y función parece requerir la utilización de aparatos y redes manejadas por las más altas tecnologías. En el aprendizaje, parece ocurrir lo mismo. El aprendizaje electrónico (e-learning) está evolucionando ahora hacia una plataforma más sofisticada en la cual el alumno tiene acceso a programas, videos y cualquier fuente imaginable que le permita el aprendizaje de conceptos y teorías. ¿Pero son realmente necesarias estas tecnologías?

Larry Cuban, en su libro “Teachers and Machines”, describe que a lo largo de la historia las tecnologías han fallado en su intento de convertirse en una herramienta de ayuda para los estudiantes.  Él explica que desde los años 1920, los avances en las tecnologías como han sido las radios educativas, las imágenes en movimiento e incluso la televisión educativa no han supuesto ningún éxito en el  impulso de los alumnos hacia su mayor potencial.

¿Por qué? Cuando los enseñantes y profesores se centran demasiado en las tecnologías, esperan que los alumnos se adapten a estos nuevos sistemas,  y no se dan cuenta de que las nuevas tecnologías pueden no estar diseñadas alrededor de la correcta educación del alumno.  Utilizar las nuevas tecnologías y sistemas parece que da una muy buena imagen del programa y un curriculum muy sofisticado, ¿pero realmente ayuda al alumno? En numerosas ocasiones la mirada se centra tanto en el papel de las tecnologías que la postura del alumno queda subestimada, o incluso ignorada.

Es por ello que una aproximación centrada en el alumno es tan importante. La utilización de tecnologías para fomentar el aprendizaje no es algo malo en sí, pero debería utilizarse de una forma adaptada al alumno, y no al revés.

Una aproximación centrada en el alumno se describe como un enfoque en la cualidad del aprendizaje a través de una mayor comprensión del alumno. Además, en el e-learning, se proporciona el soporte al alumno hasta que logra adquirir los conceptos o habilidades que quiere aprender. Ahora bien, ¿Cómo se forma una aproximación centrada en el alumno?

Aquí se encuentran cinco puntos esenciales de esta aproximación:

  1. Se fomenta la colaboración – las teorías centradas en el alumno postulan reiteradas veces que el aprendizaje no está pensado para hacerse solo. El aprendizaje se actualiza y fomenta mediante la interacción y comunicación dentro de un mismo y distintos grupos. Las aulas de clase, ya sean virtuales o reales, se ven como comunidades en las que los alumnos aprenden de las experiencias y opiniones ajenas. Los programas centrados en el alumno permiten a los estudiantes interactuar activamente entre ellos, buscar información, compartir perspectivas y respetar distintos puntos de vista.
  1. El material y las actividades son atractivos – el compromiso es la medida más real del proceso de aprendizaje. Cuando una persona se compromete, el cerebro funciona activamente procesando ideas y reflexionando sobre conceptos. Se anima a los estudiantes a reflexionar en lo que han aprendido mediante la incorporación de breves pausas para internalizar conceptos y expresar la manera en la que el contenido se relaciona con ellos. También ayudan al alumno en la valoración de su aprendizaje los escenarios basados en casos y análisis situacionales.
  1. Los alumnos tienen el control de su proceso de aprendizaje- el aprendizaje activo otorga cierto control al estudiante sobre lo que aprenden y el ritmo en el que lo aprenden. Estudios han demostrado que los alumnos se sienten con mayor poder, más efectivos y más motivados cuando tienen cierto sentido de control, comparado con cuando simplemente se les ordena lo que deben de hacer. Confiar responsabilidades en el alumno y pedirle aportaciones puede hacerle sentir más motivado y potenciar su proceso de aprendizaje.
  1. Los métodos son personalizados y pertinentes- descubrir cómo aprende cada alumno es de gran ayuda en el suministro de métodos que harán de su proceso de aprendizaje algo mucho más sencillo. Los materiales enfocados a una aproximación centrada en el alumno se presentan de distintos formatos para encajar lo mejor posible con los estilos y necesidades de cada alumno. Además, el material ha de ser tanto importante como útil para los estudiantes. Una aproximación centrada en el alumno aspira a abordar el espacio entre lo que un alumno debería saber y la forma en la que ese alumno puede aplicar los nuevos conceptos al mundo real.
  1. El material es estimulante y exigente – cuando los alumnos se encuentran con desafíos, el cerebro se esfuerza en juntar todo el conocimiento (pasado y actual) para llegar a una decisión. Estas situaciones desafiantes exponen a los alumnos al pensamiento crítico, permitiéndoles la evaluación y aplicación eficiente de aquello que han aprendido, alcanzando así un mayor nivel en el proceso de aprendizaje.

La aproximación centrada en el alumno es eficiente en el sentido en el que adapta métodos y materiales alrededor del alumno. Esto realza el aprendizaje y asegura que el alumno esté totalmente equipado con el conocimiento y las capacidades que ha aprendido durante el curso.